Por: Paola Ochoa Olivera, estudiante de Derecho en la PUCP e integrante del Programa de Desarrollo Social Khuska.

 “A pesar de que las heladas se presenten todos los años, sus devastadoras consecuencias son las mismas: muertes por neumonía, viviendas destrozadas y cultivos afectados”

(Daly 2015)

En las últimas semanas, hemos sido testigos de uno de los mayores problemas con los que el Estado y la sociedad en su conjunto debemos de lidiar. Nos referimos al intenso friaje en las zonas rurales altoandinas y de la selva, las cuales llegan a temperaturas bajo cero; cobrando no sólo la vida de los pobladores de dichas zonas, sino también los recursos naturales con los que cuentan para subsistir.

A la fecha, el Ministerio de Salud (MINSA), señaló que 604 personas fallecieron con neumonía a causa de las bajas temperaturas producidas por el friaje; de las cuales 72 son niños menores de cinco años y más de 400 son adultos mayores. En este sentido, dichas cifras se han ido incrementando en lo que va del año, siendo motivo constante de noticias.

Al respecto, la última medida adoptada por el Estado fue  la declaración en estado de emergencia de 55 distritos de 27 provincias, pertenecientes a 11 regiones del país, así como la “ayuda humanitaria” brindada por políticos. Sin embargo, cabe preguntarnos si ¿las medidas adoptadas son suficientes para revertir un problema previsible? o ¿sólo son medidas populistas, con una finalidad paliativa sin miras a futuro?

Para dar respuesta a estas interrogantes, debemos partir por reconocer que nos encontramos en un Estado cuya Constitución garantiza el derecho a la vida, salud, integridad de la persona y medio ambiente; por lo que se  le otorga protección. A continuación, se brindará un mayor alcance en primer lugar respecto del fenómeno que acarrea la problemática descrita;  y en segundo lugar, a través de un análisis respecto de cómo el Estado ha actuado o hecho caso omiso frente a tal situación.

Para empezar, debemos reconocer que las “heladas” o “friajes” son un “fenómeno meteorológico periódico que aqueja las zonas altoandinas y de la selva del Perú entre los meses de abril y setiembre, con temperaturas por debajo de los 0º C por las noches  y entre 12º C y 15 ºC  durante el día” (Daly 2015). Entre los departamentos más afectados se encuentran Cusco, Puno, Ayacucho, Ucayali, Madre de Dios y Loreto (por mencionar algunos). Al respecto, dicho fenómeno trae consigo severos problemas en las condiciones de vida de su población, como la pobreza, el analfabetismo o incluso la la desnutrición infantil; asimismo, la pérdida de su materia prima, cultivo y ganado, los cuales son su principal fuente de ingresos económicos.

Por lo que, es posible determinar que el problema, resurge la necesaria atención de una solución a largo plazo y no tan solo iniciativas temporales, sin mayor impacto, por parte del Estado a tales zonas afectadas. Dado que, son derechos fundamentales, los que se encuentran desprotegidos y en riesgo, como el acceso a servicios de salud de calidad, para poder no solo tratar sino asimismo prevenir enfermedades como la neumonía, la cual es el motivo de numerosas muertes de la región a través de políticas enfocadas en erradicar; o al menos disminuir la desnutrición o anemia y dar preferencia a la inmunización contra la influenza, neumococo o cualquier enfermedad a través de campañas de vacunación efectivas.

En este sentido, se puede decir, que las medidas que brindó el Estado, hasta el momento y tras largos años de una reiterada situación de este tipo, han sido tan solo la declaración en estado de emergencia de 11 regiones del país y el apoyo a través de “ayuda humanitaria” viajando los Ministros a las zonas afectadas y entregándoles víveres, ropa, entre otros productos para poder soportar tal situación. Lo que demuestra, que en realidad, se trata más de una medida populista que una realmente efectiva,es decir, se buscó una solución temporal, a través de medidas aparentemente directas y “a favor de los pobladores afectados”; pero que tal como se ha expuesto en la realidad, no son más que insuficientes e ineficientes, pues no resuelven el problema de fondo.

Finalmente, a través del acceso a servicios básicos como agua potable, alcantarillado y luz eléctrica,  dado que la electrificación permitiría un mejor acceso a información, como también a condiciones de vida mejores y vitales en la actualidad; mientras que el agua, disminuiría el riesgo de contagios o infestación, puesto que un buen aseo personal es de vital importancia en esta materia. Además, del cuidado en cuanto a brindar un mejor acceso a dichas comunidades, a través de la inversión en mantenimiento de carreteras y la construcción de vías, para que sea posible una comunicación más rápida y eficiente con postas médicas más cercanas o incluso de mejor calidad.

En síntesis, debemos partir por reconocer que la existencia del fenómeno del friaje y las heladas es naturalmente un problema previsible dado que ocurre cíclicamente durante las estaciones más frías del año. Así mismo, su incidencia suele ser en aquellas regiones donde menos protección por parte del Estado existe, lo que trae como consecuencia anualmente cifras devastadoras de víctimas por el fenómeno climático. Por lo que en ese sentido, las medidas adoptadas por el Estado hasta el momento, no son suficientes para prevenir un problema de tal magnitud, siendo éstas prácticamente ineficaces y sin miras al futuro. De esta manera, es importante considerar la mejor implementación de servicios básicos como el agua, la luz y el alcantarillado; o la mejora en cuanto a carreteras y vías de acceso, todos estos necesarios si se precisa una solución al menos sostenible en el tiempo.


Bibliografía:

DALY, Gabriel

2015    Informe: las consecuencias de las heladas en el país. El Comercio.Consulta: 27 de julio del 2018

https://bit.ly/2LyT0L9

DIARIO CORREO

2018    “Minsa: más de 600 muertos por ola de frío en el país”. Perú. Lima, 20 de junio del 2018. Consulta: 27 de julio del 2018

https://bit.ly/2mQIVd

EL COMERCIO

2018    “Gobierno atiende regiones afectadas por heladas y nevadas”. El Comercio. Lima, 15 de junio. Consulta: 27 de julio del 2018

https://bit.ly/2Op0YnU

PANAMERICANA

2018    “Frío que mata en puno: temperaturas menos 15 grados, ya cobran vidas”. Panorama. Emisión: 10 de junio del 2018. Consulta: 27 de julio del 2018

https://bit.ly/2vejaHZ

RPP NOTICIAS

2015    “Heladas y friajes en el Perú: ¿qué son y cómo protegerse?”. RPP Noticias. Lima, 08 de julio del 2015. Consulta: 27 de julio del 2018

https://bit.ly/2M2atrp

DEJA UNA RESPUESTA

Please enter your comment!
Please enter your name here